Seguro que te has dado cuenta de las posiciones que adoptan los tripulantes de cabina cada vez que los pasajeros subimos al avión. Lo primero que vemos en la puerta de entrada es como la tripulación nos da la bienvenida, ya habiendo atravesado el finger (si venimos directamente desde la terminal) o subidas las escalerillas del avión (si hemos atravesado la pista).
Si has sido observador, podrás saber que en la mayoría de las ocasiones la postura por excelencia para los tripulantes de vuela es tener las manos en la espalda, ocultas a la vista de los pasajeros. La razón es muy simple, el hecho de “ocultar” las manos se debe a que llevan un contador manual que utilizan para llevar un recuento de los pasajeros que van accediendo a la aeronave, para posteriormente poder comparar el número de personas que se encuentran en el avión con el que debe aparecer en la documentación de embarque.
Pero no todos los tripulantes tienen sus manos a la espalda ya que también habrás podido encontrarte con otros TCPs que muy amablemente te soliciten la tarjeta de embarque para facilitarte el acceso y ubicar tu asiento más rápidamente sin que se formen esas aglomeraciones tan pesadas en los estrechos pasillos.
Ahora cada vez que subas a un avión y veas como los auxiliares de vuelo escondes sus manos, ya sabes qué están haciendo
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